Con tu adolescencia de golondrina
inauguraste en mí
un vértigo de fuego,
repasaste mí geografía
con los primeros pájaros del día
musitando en Morse
la respuesta temblorosa
a mis noches de lluvia.
Ya no va a dolerme la noche.
Hace bastantes años
cerrar los ojos
era un tiempo perdido,
ahora los cierro
para vivirlo.
cerrar los ojos
era un tiempo perdido,
ahora los cierro
para vivirlo.

Sin duda,
la blancura de estas páginas
recuerdan cada detalle,
sobre ellas copio
lo que me dicta tu silencio.
lunes, 21 de febrero de 2011
LA RESPUESTA A MIS NOCHES
Etiquetas:
La respuesta a mis noches
Suscribirse a:
Entradas (Atom)