Mi animal de costumbre
me identifica,
a veces
en mi propia ignorancia.
Lobo dentro de mi,
desconocido irracional,
me siento un ridículo extraño
ante este huésped delirante
que me agazapa a sus pies
y me enseña con dureza,
pero también me da,
la alegría
de no temerle.
Hace bastantes años
cerrar los ojos
era un tiempo perdido,
ahora los cierro
para vivirlo.
cerrar los ojos
era un tiempo perdido,
ahora los cierro
para vivirlo.

Sin duda,
la blancura de estas páginas
recuerdan cada detalle,
sobre ellas copio
lo que me dicta tu silencio.
Mostrando entradas con la etiqueta Animal de costumbre. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Animal de costumbre. Mostrar todas las entradas
domingo, 14 de diciembre de 2008
ANIMAL DE COSTUMBRE
Etiquetas:
Animal de costumbre
Suscribirse a:
Entradas (Atom)